La gran afluencia de emprendimientos nos ha llenado de cuentas nuevas que están produciendo contenido, muchas veces copiando y pegando ideas de nuestras cuentas. Sí, a nosotros también nos ha pasado.
Si te están copiando y ello no supone una amenaza real ni una infracción denunciable, vale la pena preguntarse, ¿qué puedes hacer?
Lo primero es que deberías sentirte orgulloso. Es bueno que seas una referencia, eso demuestra que tus competidores encuentran inspiración en tu marca y te tienen en sus radares. Preocúpate cuando ni siquiera llames su atención.
Luego de tomarte esa pequeña pastilla de confía en ti, te dejamos algunos consejos que te van a ayudar a salir rápido de esa situación que te preocupa.
Marca en un lugar visible cuáles son tus fortalezas como empresa. ¿Qué te hace único? ¿Por qué existe tu negocio? Y comunícate desde ellas siempre teniendo en cuenta que tienen que estar relacionadas con el dolor de tu cliente.
Esfuérzate por contar tus historias, tus procesos, tu día a día como empresa y comunicar claramente tu visión. Cualquier empresa te puede copiar un post pero, ninguna empresa puede copiar tu historia y cómo desarrollaste tu negocio y todos los componentes que lo hacen único.
Utiliza la personalización al máximo que te sea posible para crear relaciones a largo plazo con tus clientes. Pregúntate: ¿tienes algún plan de fidelización definido?, ¿en qué se basa? Si aún no lo tienes, este es el momento de hacerlo. Un cliente nuevo puede costarte hasta 3 veces más que fidelizar y hacer recompras de los que ya te compraron anteriormente.
Checkea los perfiles de tu competencia ocasionalmente y observa qué estrategias están usando, qué estilo gráfico. Si todos son verdes, tú ve por el púrpura. Si quieres algunos tips y estrategias para analizar mejor a tu competencia ingresa aquí.
Felizmente, la mayor parte de la competencia es sana, lo que implica que nos da la oportunidad de crecer y seguir mejorando. Pensemos… ¿Qué hubiera sido de Apple sin Microsoft? ¿O de Microsoft sin Apple? Ambas compañías se desafiaron en diferentes momentos de su historia para superarse y así no dejar de innovar.
Esperemos que esta información sea una palmada en la espalda de que estás haciendo las cosas bien, pero al mismo tiempo, te ayude a identificar desafíos para seguir innovando.
Además, recuerda que siempre podemos ayudarte. En Manya, nos esforzamos día a día por crear historias únicas para nuestros clientes. ¿Listo para innovar con nosotros? Vamos por más.
